El origen de la ciguapa (folklore y mitos Dominicanos)
Las leyendas dicen que en lo profundo de los bosques viven hermosas mujeres (ciguapa) de cabello largo, que aparecen solo de noche para seducir a los hombres. Son capaces de engañar a todos, porque sus pies apuntan hacia atrás y, por lo tanto, son imposibles de atrapar.
Esta es la leyenda de las Pichal Peri de las montañas del Himalaya y muy conocidas en India y Pakistán. Pero si eres dominicano, probablemente estás pensando que esta historia como que suena muy familiar.
La misteriosa historia de la ciguapa
Las historias de misteriosas mujeres del bosque que seducen a los hombres es un tema recurrente en el folclore, aunque no todas tienen los pies al revés. En el área de los Himalayas de India y Pakistán estas damas con los pies al revés son conocidas como Churel, Petni o Pichal Peri.
En las Filipinas como Aswang, y en Eslovenia como Krivopete. En Marrueco como Aicha Kandicha, Kuchisake-onna en Japón, Rusalka en los pueblos eslavos, Huldra en Escandinavia y Xana en Asturias, mientras que en Latinoamérica hay la Sayona de Venezuela, la Tulevieja de Costa Rica y Panamá, la Patasola de Colombia, la Viuda de Chile, la Xtabay de Yucatán, la Cegua de México y la Siguanaba o Ciguapa de toda Latinoamérica.
Entonces, ¿Están los bosques llenos de mujeres invisibles? Bueno, ¿qué es una leyenda? Son historias que se cuentan de generación en generación, a menudo para asustar o para enseñar una lección moral. Algunos historiadores proponen que las leyendas latinoamericanas tienen sus raíces en la mitología de los Maya. Por ejemplo, rastrean las leyendas de mujeres seductoras hasta la diosa maya Ixtab.
Pero a la llegada del cristianismo, los misioneros cristianos usaron folclore local para advertir sobre comportamientos no cristianos. Y la única forma de protegerse de estas criaturas malvadas era bueno, adoptando el cristianismo.
Un tema común llegó a ser que estos seres les tienen miedo a las iglesias, los sacerdotes y la cruz. Ese fue un método muy eficaz para la conversió de los paganos al cristianismo, usando sus propias supersticiones en contra de ellos.